GENERAL SANTOCILDES.

Calle General Santocildes en Burgos

Hace unos años comenzó una curiosa "persecución" a todo lo relacionado con lo militar. El argumento de esta campaña es la eliminación de todo lo relacionado con la dictadura de Franco, aunque con ello se elimine mas de cuarenta años de historia de España tengan o no tengan que ver con la dictadura. Una de estas iniciativas consistió en eliminar o cambiar nombres de calles. En Burgos en cuestión se solicitó la sustitución de la calle General Santocildes, entre muchas otras que carecían de argumentos. Esto despertó la iniciativa y la obligación de poner estas entradas. El señor Fidel Alonso de Santocildes nació en el pueblo burgalés de Cubo de Bureba, al noreste de la provincia, en el año 1844. Debido a las circunstancias de la época en que solo se podían hacer cargo las familias de un numero limitado de hijos, Fidel fue enviado a temprana edad a Burgos capital para ser educado por sus tíos; un Coronel del ejército y el párroco de la iglesia San Nícolas. Esto desembocó en dos caminos en la educación del pequeño Fidel motivados por sus dos tíos; la eclesiástica y la castrense. La vía militar contó con el apoyo del abuelo materno que era el Teniente General José María de Santocildes y LLanos; héroe de la Guerra de la Independencia. Esta disputa finalizó cuando en el año 1859 nuestro protagonista ingresó en el Colegio de Infantería de Toledo. Al finalizar sus estudios fue destinado a las Antillas donde desarrolló casi toda su carrera militar. Participó en las insurrecciones de Santo Domingo, en la de Cuba de 1869, y en otras costeras de Manzanillo, Bayamo y Juagani; y en interiores como Loma de Pancho Fonseca, Faldón, Las Cajitas, Piedra de Oro y La Rinconada. Sus acciones en Cuba le permitió conocer al General Martínez Campos, pero también problemas reumáticos. En el ´71 fue destinado a la parte oriental de la isla donde sirvió a las ordenes del General Galbis, futuro Capitán General de Burgos, y del Burgalés Coronel Sanz Pastor. Con este último gano la corbata de San Fernando en la retirada de San Ulpiano para su Batallón. Ese mismo año de 1878 se firmó la paz de Zanjón, que ponía fin a la guerra de los “Diez Años” (1868-1878). Santocildes fue enviado a Cifuentes y ascendido a Coronel con el mando del Regimiento “Cazadores de Chiclana” en la Habana.
El 26 de agosto de 1879, al grito de “¡Independencia o muerte!” se levantó Martí  en la ciudad de Holguin y pronto se unió Manzanillo. Ambas localidades pertenecían a la Comandancia Militar que mandaba el coronel Santocildes; que inmediatamente se puso al frente de sus tropas para acudir a sofocar este nuevo levantamiento. En septiembre de 1880 consiguió la derrota total de los rebeldes, y Santocildes viajo a la Península. 
En 1884 volvió a Cuba tras pasar tres años en la metrópoli y se le designó el mando del Regimiento de la Reina. Ostentó el mando de los Regimientos de Isabel la Católica y del Orden Público de la Habana. 

El 24 de febrero de 1895 se sublevaron simultáneamente 35 localidades cubanas contra la ocupación española. Era la tercera insurrección de los cubanos contra el dominio español.

El coronel Santocildes dirigió a la batalla al Regimiento de Isabel la Católica, operando por la zona de Manzanillo, con enfrentamientos frecuentes y encarnizados. Esto le valió su ascenso a General de Brigada en mayo de 1895. 
El general rebelde Antonio Maceo obligó al general Martínez Campos a dirigirse la zona Oriental en ayuda del general Santocildes. En julio de 1895 el general Maceo concentró sus fuerzas en Bayamo, donde acudió el general Martínez Campos con un convoy  organizado en Veguitas. Mientras, el general Santocildes se dirigió hacia Río Buey. El día 13 Maceo abandonó Bayamo y ocultó sus tropas entre las sabanas de Barrancos y Río Mabay; buscando a las tropas de Santocildes que estaban acampadas en la sabana de Peralejo. El general Martínez Campos y sus refuerzos quedaron bloqueados en Bayamo.  Cayendo Santocildes y sus tropas en un ataque masivo por parte de los rebeldes, donde superándose las mil bajas, incluida la del propio general Santocildes tras recibir dos balazos en el pecho. A pesar de los cuales siguió alentando a sus soldados hasta que recibió un tercer balazo en la cabeza que acabó definitivamente con su vida.

General Santocildes.  Fuente: http://www.latinamericanstudies.org/

El general Martínez Campos estuvo ocho días bloqueado en Bayamo, hasta que llegaron en su ayuda las tropas de los generales Lachambre y García Navarro. 
Esta acción militar de Peralejo costó el puesto a Martínez Campos, y permitió a los mambises apoderarse de la totalidad de la Provincia Oriental.  El general Santocildes fue condecorado, a título póstumo, con la Cruz Laureada de San Fernando. 

El 29 de diciembre de 1898 fondeó en el puerto de Santander el vapor “San Ignacio”, en el que viajaban los restos mortales del soldado Eloy Gonzalo García, héroe de Cascorro; el general Joaquín Vara del Rey, héroe de El Viso y el general Fidel Santocildes, héroe de Peralejo. Seis años después sus restos recibieron sepultura en el Real Panteón de Nuestra Señora de Atocha.

Mencionar que durante la estancia de Santocildes en la Habana, existió una nutrida colonia burgalesa que fundó la “Sociedad Benéfica Burgalesa de La Habana”; de la cual el coronel Santocildes fue nombrado presidente y consiguió la construcción de un monumento al Cid Campeador,